En Laurel, disfrute de 24 m2 de luminosidad y de una gran ducha a ras de suelo. También le sorprenderá su vista sin obstáculos sobre los tejados de la Bella Durmiente.
Para su comodidad, encontrará en todas nuestras habitaciones el equipamiento necesario para disfrutar de su estancia en las mejores condiciones.
Encontrará, entre otros, en nuestra sala de Laurel :
Tonos plateados con sutiles reflejos. Nuestra habitación Chêne es un pequeño capullo de suavidad en el corazón del hotel.
Discreta, aireada y florida, la habitación Kinmokusei nos transporta a la dulzura de la infancia, a los misterios de la noche y a la…
Nuestra habitación Marronnier le invita a levantar el vuelo y a sentir la luz. Un nido de suavidad, aireado y discreto con vistas a la avenida de castaños del Cours …
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